Jueves, 14 de noviembre de 2013
En el post 10 tendencias que me gustan para nosotras de este otoño-invierno (ver aquí), os comentaba que se llevan mucho las prendas de cuadros (camisas, chaquetas, abrigos…) y los sombreros. Pues bien, el otro día saqué del armario esta americana de cuadros en tonos marrones, de la diseñadora Carmela Rosso, que compré hace años en Minobay. No me la había puesto mucho, porque me parecía difícil de combinar con los cuadros tan grandes y asimétricos (hoy tan de moda). Y también rescaté de lo alto del armario este sombrero marrón que tiene, al menos, quince años, y que es de El Corte Inglés, según pone en la etiqueta. Así en este look, tan otoñal, combino dos tendencias actuales y continúo con mi serie sobre la americana o blazer, una prenda que me gusta mucho, que nos favorece y que es muy apropiada para nuestra edad.
Combiné chaqueta y sombrero con unos vaqueros negros de C&A, con un top de H&M color crema que tiene unos detalles de lentejuelas en el escote, y con unos zapatos nude de tacón de Mary Paz. El bolso es otro viejo amigo que rescaté del baúl la temporada pasada.
¿Os gusta la tendencia de los cuadros grandes en las prendas de arriba? Pues animaros con ella, y, si queréis comentar vuestra experiencia, podéis hacerlo aquí, y también me encantaría que compartierais vuestros looks a través del facebook de Cincuenta Years.
Me encanta el sombrero, porque no es demasiado grande de alas, ni demasiado alto. Si aún lo tuvieran…
Hola, Julia. El sombrero lo compré en El Corte Inglés hace más de diez años. Igual ahora tienen algo parecido. Como esta temporada se llevan mucho los sombreros, seguro que encuentras alguno parecido.
La chaqueta es preciosa, tiene mucho estilo. Combinada con el sombrero, queda ideal.
Muy guapa con sombrero. Pontelo más.
Qué colorido de pared más bonito con las parras. Me encanta el color del otoño y de sus hojas. Ha sido un acierto hacerte ahí las fotos.
RESPUESTA A ISABEL
Hola Isabel. Gracias por leer mi blog. Ayer pasé por este mismo lugar, y ya apenas hay hojas. El paisaje está totalmente modificado. Eso es lo bueno de captar instantes únicos e irrepetibles, y el otoño tiene muchos.