Nieve blanca. Nieve de enero. Tiene la nieve, en su blancura, algo de virginidad y de purificadora belleza que se celebra como una fiesta, al menos en Zaragoza, ciudad en la que no es frecuente que nieve. De vez en cuando, cada cuatro o cinco años, la vida nos regala estos paisajes blancos, ese manto níveo que hace que la naturaleza se muestre en todo su esplendor.
De estas fotografías hace hoy un año. Fueron realizadas el 9 de enero de 2021 y estábamos inmersos de lleno en la pandemia que asola a España y al mundo entero desde 2019 y que tantas vidas se ha cobrado. Covid-19 le llaman, aunque a España llegó con toda su virulencia a finales de febrero de 2020 hasta llegar al confinamiento total en marzo de ese mismo año. El virus fue perdiendo fuerza desde el año pasado. Quizá sea verdad eso de que «año de nieves, año de bienes». Las vacunas han hecho efecto. Deseo de todo corazón que pronto sea un mal recuerdo.
Disfrutamos mucho de esa nevada que nos permitió reír y bailar bajo la nieve.